enero 21, 2014

Una Religión llamada Umbanda (3º parte)

Para Edson Carneiro hay una diferencia básica entre Umbanda y Macumba, aunque ambas sobreviven una al lado de la otra. "Las fraternidades, llamadas en un inicio macumbas, comprendían el lenguaje mágico de los tambores y la posesión de la divinidad de acuerdo con el modelo original, por esto se vieron expulsados ​​del perímetro urbano carioca; por el contrario, las sucesoras o aquellas que se adaptaban a las nuevas exigencias policiales, pasaron a llamarse “Umbanda”, suprimiendo los tambores y moderando la posesión”. 

El primer Congreso Umbandista, se realizó en Río de Janeiro en 1941, con el objetivo de estructurar una práctica religiosa, la que ya se venía realizando desde hacía más de treinta años, pero desordenadamente. En ella fueron delimitados los elementos de cuyo sincretismo surgió la Umbanda en sus diversas presentaciones; dado que no había unidad doctrinaria y ritual, justamente el propósito de los organizadores de aquel “simposio umbandista”, era intentar tal unificación de criterios para el mayor fortalecimiento de la religión. (Pero esto no funcionó, porque en realidad no se discutía la visión general de la religión como un todo, sino que se trataba de imponer verdades, ritos, formas y dogmas, según la propia manera de cada quien. A pesar de esto, la gran contribución fue la formación de más Asociaciones y Federaciones con el fin de proteger los trabajos y la identidad de lo que practicaban). 

Actualmente la Umbanda surge como en un fenómeno social de gran importancia, dado su creciente predominio... Ya se cuenta actualmente en con cientos de terreiros, ilês, templos y seguidores, lo que la coloca en la posición de “religión”, prevista por los estudiosos como la que deberá predominar en unos pocos años.

A pesar de la tradición africana, la Umbanda puede considerarse esencialmente brasilera. Los santos de adaptan al entorno y se utiliza un lenguaje sencillo y comprensible, mientras que los cultos originarios africanos pueden servir de modelo en lo que se refiere a la comunicación. Dicha adaptación explica el éxito de la Umbanda. Además de esto, el crecimiento de la Umbanda se debe, principalmente, a satisfacer las necesidades populares de las clases más bajas y necesitadas de la sociedad brasilera, que encontraron en esta religión, una identificación inmediata. (Cabe aclarar una salvedad, ya que además de las clases más bajas, la clase media y clase media alta también están representadas en diferentes segmentos).

Para que este fenómeno cultural y religioso tenga lugar, contribuyen bastante:

a) El ritual, simple y directo. El médium adopta la vestimenta en una igualdad de condiciones con el ambiente (el ritual de Umbanda puede ser más simple, más complejo o incluso inexistente, todo depende de la formación, de la ramificación y sus prácticas).

b) Comunicación directa. El creyente habla directamente con la “entidad”, a través de su “cavalo”, sin mayores problemas y con una gran sencillez; el piadoso trata sus asuntos de una forma espontánea y clara, en un lenguaje de fácil comprensión (el cual también es variable conforme la ramificación de la Umbanda que se esté practicando).

c) La inmediatez. La capacidad de resolver sus problemas en el corto plazo.

d) El sincretismo religioso. Lo que contribuye positivamente a aumentar el número de seguidores al culto umbandista. A través de caboclos, Pretos Velhos y exús, se observa una integración de las religiones, cuyos resultados podrán ser benéficos para los que buscan a la Umbanda como un cordón extensivo de la religión católica, a la que todavía respetan, a la que aún le creen, pero de la que se distancian cada vez más (al igual que aquellos que practican el espiritismo, que se sienten atrapados por un modo artificial y intelectualizado, encuentran en la Umbanda un lenguaje más sencillo y humilde).

e) La mística, extremadamente simple y de poesía sencilla, alcanza directamente los sentimientos del pueblo (en lugar de una mística más compleja involucrando una serie de elementos teosóficos y cabalístico altamente elaborados).

f) Los instrumentos son de percusión y el ritmo vibrante marca todo el culto (el que varía en función del origen de la rama, ya que no todos adoptan el uso de instrumentos de percusión).

g) La facilidad de entrar en contacto con la religión, para hacer la ceremonia religiosa. 

Frei Boaventura da su posición católica con referencia a la Umbanda afirmando que "es el movimiento religioso más popular, junto con el pentecostalismo, especialmente entre la gran masa suburbana, y que empieza a penetrar en las zonas rurales y también afecta a las poblaciones de origen europeo. Se podría decir que la mayoría de los concurrentes (y dirigentes) son de raza blanca, incluso de las clases sociales más privilegiadas."

Para él, la impresión de "estar frente a un fenómeno de erupción violenta de religiosidad insatisfecha con las formas religiosas oficiales y rígidas, excesivamente controladas y frías, demasiado complejas e intelectualizadas, que no dan suficiente atención a las tendencias y demandas profundas de las peculiares formas culturales de un determinado pueblo, impiden la manifestación espontánea del alma popular religiosa.

La Umbanda, continua Frei Boaventura, "da la impresión de ser una protesta popular contra todas las formas importadas e insuficientemente adaptadas de religión". (...)Debemos intentar valorizar positivamente los ritos, usos y costumbres de la religión umbandista en Brasil, ya que se puede afirmar que la presencia de la Umbanda en Brasil es la presencia de la África Negra en Brasil ".

Para aquel fraile, "El hombre negro es esencialmente religioso, cultural, simbólico, mítico, ritualista, celebrante, vital, sapiencial, contemplativo, social y comunitario (esta posición frente a la vida, fue lo que le dio apoyo frente a la esclavitud, la humillación, al ser tratado como una “cosa sin alma, sin religión”; y también como una forma de preservar su cultura, sin la cual el negro no habría sobrevivido); en este fenómeno general, el negro africano tubo la preocupación continúa de ponerse en contacto permanente con el mundo del más allá (el astral, Orun), lo que lo convierte en un ser estructuralmente religioso; por eso, su cristianización para ser auténtica debe partir esencialmente de este supuesto básico (al contrario de lo que se piensa, el negro no cedió al cristianismo católico, si lo absorbió haciendo que coexista armoniosamente con los Orixás y los antepasados ​​de África. No hubo una  aculturación del negro a la cultura del blanco, si una adaptación de las necesidades religiosas africanas a la religiosidad impuesta por el blanco.

Para finalizar, dice que "Tenemos que descubrir con alegría y respeto las simientes ocultas del Verbo en las culturas africanas. Con todo, la Umbanda no es una tradición africana y si un curioso sincretismo de elementos africanos, amerindios, espiritas, católicos… “(Así como en las religiones más importantes también existe un sincretismo variado y diverso dentro de luchas culturales y apropiaciones históricas, en la Umbanda no podría ser diferente). 


Hasta la próxima, axé de Xangô a todos y todas.

Modúpé lówó àwonòrìsà mi bùnkún fun áwa ati àlàáfià.
Káwó kábíyèsí lè Obakòsó Sàngó Aganjú !!! 

Pai Fabio de Sàngó Aganjú 
Ilê Aláyéluwa Sàngó - C.E.U. Pai Xangô 7 Pedreiras 

¿Por qué aguardas con impaciencia las cosas? Si son inútiles para tu vida, inútil es también aguardarlas. Si son necesarias, ellas vendrán y vendrán a tiempo. 
Amado Nervo (1870-1919) Escritor mexicano. 

Datos de la publicación: 
Autor: Etiene Sales 
Traducción: Pai Fabio de Sàngó Aganjú 
Fuente: Libro “Rituais Negros e Caboclos”; Nivio Ramos Sales. 
Imagen: Unicorn & Pegasus by Rowena Morrill